Los Rolex de oro, los Yacht Master II

Si la elegancia y el lujo tuvieran forma humana, y si éstos necesitaran medir el tiempo, lo harían usando los Rolex de oro, concretamente los Yacht Master II. Aparte del de acero y platino o el que combina acero y oro amarillo, existen tres modelos de la gama realizados íntegramente en oro, sea amarillo, sea blanco, y de los que vamos a ocuparos en los próximos párrafos.

Una máquina suiza: ¿Necesitamos saber más?

Vamos a hablar de las características comunes de unos y otros relojes: Para empezar, la caja de unos y otros es muy similar: de cuarenta milímetros de tamaño, con bisel giratorio y hermética hasta cien metros. En lo que se refiere a las funciones, son las propias de un reloj analógico de lujo, con alguna novedad, como la cuenta atrás mecánica en alguno de los modelos.

Pero no se trata de revisar tamaños, funciones o características… “mundanas” de estas obras de arte suizas. Si queremos saber de ellas, basta con navegar un poco por la Red y daremos con las funciones, tamaños y demás de los Yacht Master II sin demasiado problema.

Se trata de resaltar un valor que no parece que nadie vaya a osar restarles. Para empezar, el que les otorga la marca en sí, acercándose cada vez más al deporte. En este caso concreto, al de la regata, con unas máquinas perfectas para ella.

El reloj de la élite

Con todo, por más que Rolex patrocine acontecimientos deportivos cada vez más cercanos a las masas -pensamos en el tenis-, esto no significa que se haya popularizado. Ni mucho menos.

Es más: si estamos pensando en adquirir un reloj de esta gama, deberíamos acercarnos a un distribuidor oficial para evitarnos engaños y disgustos. Y pesar que si nos ofrecen, por ejemplo el modelo Oyster Perpetual por menos de veinticinco mil euros, es fácil que no sea el auténtico.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Time limit is exhausted. Please reload CAPTCHA.