Para empezar, no confiemos nuestro dinero a la primera persona que se autoproclama bróker. Pensemos que en mundo de las inversiones existe como mínimo tanto timador como en cualquier otro, por no decir que más.
Elijamos a una persona de prestigio y honradez probados. Es posible que la comisión sea más alta, pero también es fácil que lo sean las ganancias. Además, la seguridad y el estar tranquilo, como todo en este mundo, tiene un precio. Si no contamos con la referencia de una persona e confianza y buen tino, lo mejor es entrar a los foros en línea de inversores y ver cuáles son los brókers más recomendables.
El bróker, de prestigio y según nuestra estrategia
Además, existen plataformas de brokers que responden con su nombre de la profesionalidad de sus empleados y que, además, están sometidas a regulación externa. Si queremos asegurarnos de poner nuestro dinero en las manos correctas, informémonos sobre personas e instituciones.
Aparte de esta primera e importantísima consideración, la elección de un bróker está condicionada por la estrategia que hayamos planeado para nuestro dinero: si la idea es invertir a corto pazo -un riesgo, cuando hablamos de oro, precisamos de una persona que esté pendiente, en todo momento, de nuestra inversión y que compre o venda en el momento ideal.
Nuestro éxito dependerá del bróker
Si por el contrario hemos pensado invertir diversificando los fondos, lo que debemos calcular es el coste de las comisiones o la cuota de mantenimiento. Esto es, hacer cuentas de cuánto vamos a tener que pagar por ganar dinero.
Tengamos en consideración que si elegimos a la persona o plataforma adecuadas, es fácil que logremos una exitosa carrera en bolsa; si no, el fracaso está, ya que no asegurado, sí a la vuelta de la esquina.